Reencuentro

Sabéis lo que siento, silencio. Sabéis lo que pienso, vacío. Hoy es un gran día, hoy me he dado cuenta de lo que no soy, la luz me ha cegado y ha hecho de mi lo que escribo. Vivía en una isla del planeta océano alejado de los semblantes, libre de cualquier cuidado, pero he descubierto que no estoy sólo, que maldigo su compañía. Hoy he descubierto lo que había perdido: la soledad, esa relación que te une con la nada de cualquier tiempo, esa emoción que te ahoga, que te hunde y aún así la adoras.

Hoy la luz era demasiado intensa, el sol ha llegado a su límite, casi me quemo, el dios de la vida, el dios de la muerte ha hablado, no con palabras, ni con señales, simplemente ha dicho y yo he entendido. Aquí y ahora defino mi destino, el futuro que elijo, voy a ser lo que era, voy a romper todas la cadenas, vuelvo a la oscura matriz donde pertenezco, al cuidado de la ira de la sombras, bajo el cobijo del frío sueño. Voy a ser mortal de carne, frío de emociones y de calculado pensamiento. Soy todo lo que odio, todo lo que no quiero y me obligo. Seré mi muerte en vida. Eso es lo que no quiero y lo que aquí dejo.

El tiempo pasa, pero el dolor perdurará, me acompañará hasta que ponga fin a mis días, así lo dicto. Este es el grito a la muerte, a la reclamada no-vida, la razón, ya no importa, la respuestas, ya están perdidas. El tiempo comienza a descontar."

Publicado en 2010-02-05-11-01

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