La hoja en blanco

Esta hoja en blanco me está provocando. Quiere que la llene de letras con un sentido propio, digno, inmejorable, algo que en este momento no me veo capaz de hacer. No entiendo como la gente es capaz de sentarse con la dureza de este lienzo vacío y es capaz de crear cosas tan hermosas, sencillas, inventar historias y plasmar en ellas todos los pensamientos inverosímiles que otros se sumergen y devoran cada una de las letras.

Esta es una batalla que nunca he logrado ganar, buscar un principio, un idea en el cajón de los desastres que resulta mi cabeza. Orden es lo que necesitaría, etiquetar cada uno de esos pensamientos para obtener la forma más esbelta que genere un escrito comprensible. Juntar por juntar, las letras van y vienen solas, no necesitas dirección, todas en ruidosa comparsa para acabar arrugando la hoja y lanzarla lejos, lejos de mi vista en lo que resulta algo imperdonable como no amar lo que escribo.

Me concentro, hago fuerzas y me siento inútilmente con los ojos abiertos ante esta irrespetuosa hoja en blanco, la rallo, la arranco, la estrujo y sigue el camino de su hermana, la gravedad y la señora de la limpieza harán el resto. Otra hoja en blanco aparece ante mis ojos, atónito por el descubrimiento, deduzco que voy perdiendo.

Comencemos:

''“Qué bonito y hermoso es el amor cuando uno se siente en brazos de un sencillo y cálido deseo, una sensación nueva cruza todo el cuerpo, revolviendo lo que uno mismo ha forjado y ahora en el capricho de unos labios…”

''

Vuela hoja, vuela y llévate estas estúpidas palabras allí donde nadie las leas. Me levanto, miró la hoja desde lejos, ahí sigue, impasible, ella no piensa, no siente, no ama, no odia, no teme, simplemente está ahí, esperando, jactándose de mí, mientras sus hermanas se han convertido en la alfombra por la que ahora camino.

Difícil y estoy cansado, creo que hoy no tengo ganas de escribir, creo que no es el momento adecuado para plasmar las letras, no me entendáis mal, no es una derrota, ni mucho menos, tampoco es una huida, la hoja continuará ahí a lo largo del tiempo yo sólo tengo que atraparla y dejar correr la sangre, pues esta es una batalla diaria, entre lo inmaterial y lo inmoral de mis pensamientos.

La veo reírse mientras me alejo."

Publicado en 2010-01-15-08-00

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